Tengo que hacer una salvedad al post anterior sobre cómo congelar la leche materna.
Mi amiga Merche, mamá de Marco, me ha hecho caer en la cuenta de que no todos los envases de plástico son igual de buenos para la conservación de la leche porque algunos de ellos pueden tener
Bisfenol A.
El Bisfenol A, es un producto químico que se utiliza en la fabricación de algunos plásticos y que puede provocar cáncer.
Por eso, en los productos para bebés pone "libre de BPA o Bisfenol A".
Para saber si un plástico tiene o no Bisfenol A, sólo tenemos que buscar el símbolo que lo identifica. Este símbolo o etiqueta de reciclado aparece en todos los envases de plástico, normalmente en el fondo, y son los siguientes:
imagen de preguntasfrecuentes.net
"Existen más de 100 tipos de plásticos pero principalmente se utilizan los 7 indicados.
Los plásticos en los que en la etiqueta de reciclado figure un
1
(polietileno de tereftalato/PET ó PETE) se deben utilizar una sola vez.
No se pueden reutilizar.
En los que figura un
2,
4 ó
5 son los más seguros.
Las marcadas con el número
3 (chloride/PVC polivinilo)
pueden también desprender BPA y ftalatos.
Si figura el número
6 (poliestireno/PS) hay que tener precaución ya
que el estireno es un producto químico
potencialmente tóxico que se
libera cuando el recipiente de plástico se usa para guardar o calentar
alimentos o líquidos a temperaturas mayores de 80°C.
Si figura el número
7, se deben evitar totalmente, ya que
desprenden Bisfenol A (BPA) en el contenido del recipiente".
Las botellitas de yogur de las que os hablaba en el post anterior son del tipo 1 y las bolsitas de hacer hielo del tipo 5, asi que son seguras. Sin embargo, hay envases específicos para la congelación y conservación de la leche materna. Los más populares son los de
Avent (que son los que utilizaba mi amiga) y las bolsas de
Medela, que aunque son más caros es verdad que quizá sean los más seguros.
