En esta temporada que no escribo en el blog a Berta y a mi nos han pasado muchas cosas.
Entre ellas, mi vuelta al trabajo. Todo se complica y el cansancio se multiplica. Siempre mirando el reloj y el día nunca se acaba, porque cuando no tienes que cambiar a la peque, tienes que preparar la papilla o el biberón y enseguida llega la hora del baño... una completa locura que no me deja tiempo para nada.
Por si esto fuera poco, Berta tuvo
bronquiolitis y estuvo dos días con fiebre.
!Ah! por cierto ya están aquí los dientes que, aunque pequeños, son afilados y hay que tener cuidado porque...!muerde!